Poco después de la separación de Chopin y George Sand, éste entra en el tramo final de su vida. Enterada del inminente final, George Sand acude a casa del compositor a despedirse, pero su hermana no la deja pasar. Este es el punto de arranque de Los Nocturnos: las palabras no dichas, los abrazos no dados, las miradas perdidas. La no despedida de un amor sostenido en el tiempo. Los Nocturnos alude no sólo a las sublimes piezas del compositor, sino a la vida en común con la escritora francesa, pasando infinitas noches despierto componiendo una música que convertiría en eterna. Diría Joaquín Achúcarro: “Bach habla al universo, Beethoven a la humanidad, y Chopin a cada uno de nosotros”. Y es que cuando escuchamos los Nocturnos de Chopin hay algo de movimiento interno, de caricia, de abrazo esperanzador. Es un contacto directo con el alma. Y lo que sucede es que los Nocturnos no son sólo música. Son poesía.
Notas.
Una obra acerca del sentido de la vida, de la muerte, y del amor.
Otros datos.
Estreno: Teatro Pérez Galdós, Las Palmas de Gran Canaria
Estudié dramaturgia en la Resad de Madrid, promoción 2001-2006. Me licencié en cinco años y no cuatro porque al mismo tiempo estaba formándome como actriz en las escuelas de Mar Navarro y Juan Carlos Corazza. La interpretación es algo que siempre ha sumado a mi visión de la escena. Mis años en la Resad fueron de una creatividad y una riqueza brutal. Tuve la suerte de tener entre mis profesores a gente como Juan Mayorga, Ricardo Doménech, Ignacio Amestoy, Itziar Pascual, Juan Antonio Vizcaíno, Pedro Víllora, Luis Landero, Fernando Doménech, Yolanda Pallín, José Vicente Torrejón… Entre todos me enseñaron a leer teatro, aprender de los clásicos, reverenciar a los contemporáneos. Hice algunos talleres con maestros como Suzanne Lebeau, José Sanchís Sinisterra o Guillermo Heras. Mi primer estreno como profesional fue en el año 2003, en Escena Contemporánea, con Sanedrín 54. Luego vendría todo lo demás. También soy Licenciada en Derecho y Periodismo, pero esa es otra historia. Mis faros, mis puntos cardinales, son Shakespeare, Chejov, Angélica Liddell y Tom Stoppard. Y en lo alto, como la luna, Lorca.
Escritura.
La mayoría de mis obras surgen de una noticia o de algo que ha sucedido (y sucede) a mi alrededor. Puede venir de una fotografía, un vídeo, una charla o una canción, pero tras la revelación o enamoramiento, está la necesidad imperiosa de contar una historia. Esa.
The majority of my works are inspired by an event or something that has happened (and is happening) around me. I may find inspiration in a photograph, a video, a discussion or a song, but behind the revelation or falling in love lies the imperious requirement to tell a story. That is how I would describe my work.