Hace ya más de veinticinco años que mantiene una relación de amor-odio con el teatro. Relación con idas y venidas, pero con algo que hace que se siga sosteniendo de manera firme: la pasión por lo que hace. En 1994 participa en su primer taller de teatro y desde ahí, una serie de hechos concatenados, a los que no opone ninguna resistencia, la conducen al momento actual. Se forma en el Instituto del Teatro y las Artes Escénicas de Asturias y posteriormente con profesionales como Arnold Taraborrelli, Esperanza Abad, Josefina Aráez, Carmelo Gómez, Denis Rafter, o Lucía Miranda entre otros. En 1999 comienza a trabajar profesionalmente con diversas Compañías del panorama nacional. Su trayectoria en dramaturgia se inicia de manera íntimamente ligada a la interpretación. El deseo de hacer espectáculos de creación propia la lleva a escribir sus primeras obras y también a iniciar una trayectoria empresarial en 2008 formando la Compañía “La Tejedora de Sueños”. En 2020 crea la Compañía que gestiona actualmente, “Luz de Gas Teatro”. La primera vez que se sintió dramaturga fue cuando descubrió que al otro lado del atlántico otras actrices daban vida a sus palabras. En medio de todo este fluir obtiene una licenciatura en psicología por aquello de tener un plan “B” y ahora, pasado el tiempo puede decir que ese plan “B” es algo que complementa enormemente su formación y que define en gran medida su escritura. En definitiva, ese dejarse llevar la ha convertido en una mujer de teatro.
Escritura. / Style.
«Bebo de lo cotidiano, de lo que escucho en la cola del supermercado, en una cafetería o en la sala de espera de una consulta médica. Me gusta buscar el drama en la comedia y la comedia en el drama. Adoro jugar a escribir esa conversación que observo en mudo desde mi ventana. Hay mucho de mis propias vivencias en cada texto, de aquella frase que dijo un amigo en mitad de una discusión, de esa reflexión que me hizo cambiar mi punto de vista y sobre todo de lo que me mueve y remueve tanto para bien como para mal. Trato de dibujar personajes con los que la gente se identifique en alguna de sus aristas. Pero por encima de todo, me gusta explorar las relaciones humanas, juntar a personajes a priori incompatibles pero que por circunstancias se encuentran en el mismo tiempo y espacio. y debo reconocer que tengo una inclinación natural a escribir sobre mujeres, sobre sus miedos, sus deseos, sus contradicciones, mujeres de hoy, pero también aquellas que por el contexto y la época que les tocó vivir, no se vieron reconocidas como merecían.» (Mayra Fernández).
Espacio escénico El Huerto, Gijón, 2020
Segundo premio a un fragmento de la obra en el II Concurso de Microteatro 8M, Cuéllas por la Igualdad + Texto nominado a los Premios Oh!, Asturias, 2020